¿Quiero ser lleno del Espíritu para que Cristo sea glorificado? ¿O anhelo su plenitud para mi propia gratificación y auto glorificación?
Ser llenos del Espíritu Santo tiene que ver con un propósito supremo: Glorificar a Cristo!!!!
En Juan 16:14 Jesús mismo enfatizó que el Espíritu Santo lo habría de “glorificar”, lo haría tomando de lo que Él es y dándolo a conocer a sus seguidores. La versión popular utiliza el término “honrarlo” para describir esta acción. Y en Juan 15:26 dice que el Espíritu Santo “testificaría” de Él, es decir que su enfoque total sería la persona y la obra de Cristo. Ser llenos del Espíritu Santo tiene que ver entonces con la persona de Cristo, con la manera en que el Espíritu nos lo da a conocer y lo exalta en nuestro ser, con la manera en que nos transmite el poder de la vida de Cristo y como esa vida nos transforma a su imagen.
No hay lugar en este accionar para la gloria de los hombres o las ventajas personales, esto tiene que ver con Jesús en nosotros y no con nosotros como enfoque principal. Así que cuando el Espíritu Santo manifiesta su accionar en nuestra vida y a través de nuestra vida debemos entender que cada uno de nosotros es solo un medio en ese accionar que buscar honrar a Cristo en este mundo. Somos dichosos de ser receptores de su llenura, pero a la vez debemos cuidar que esa llenura no sea retenida, no sea vista como un premio o una recompensa, no sea utilizada para obtener ventaja personal o ganancia, porque es un terreno muy peligroso. Como hemos escuchado en alguna ocasión, Dios no comparte su gloria con nadie, así que nuestra aspiración al ser llenos del Espíritu Santo debe estar en armonía con el propósito de la misma, que Cristo sea exlatado, glorificado, honrado en y a través de nuestra vida.
“Los motivos del corazón siempre serán un filtro en cuanto a ser llenos del Espíritu. Buscar nuevas sensaciones y experiencias para satisfacer la curiosidad, querer parecerse a otros, pretender alcanzar un nivel superior o simplemente ver la llenura como un recurso para solucionar nuestros problemas siempre serán motivos erróneos e ilegítimos que deben ser evitados” Billy Graham.
Que Él sea más y más evidente en nuestras vidas, que los demás lo vean más y más a Él y menos a nosotros.
¿Quiero ser lleno del Espíritu para que Cristo sea glorificado? ¿O anhelo su plenitud para mi propia gratificación y auto glorificación?
Oscar Montero C.